viernes, 24 de julio de 2009

Restaurante Sergi Arola Gastro** (Madrid)




Por Cavatappi

Pequeño viaje gastronómico a la capital del reino, invitados por nuestro patrón, para celebrar el premio recientemente concedido, y limar asperezas por el hecho de trabajar en precario y sin presupuesto.

Una vez seleccionados los establecimientos a visitar y tras el pesado viaje de ida, descansamos un poco en la habitación del hotel y comenzamos la ruta.

La primera parada fué en el Restaurante Encinas y resultó una experiencia muy positiva, por la cercanía de sus propietarios y el cariño que rebosaba en la elaboración de cada plato.

Por la tarde, nos acercamos hasta el Glass Bar en el Hotel Urban (http://www.hotelurban.com/), cerca del Congreso de los Diputados.
Lugar de culto para la gente más cool de la ciudad (críticos gastronómicos a sueldo incluidos). Rodeado de vidrio y presidido por una lámpara de araña y con sillas transparentes. Nos acomodamos en uno de los sofás laterales y pedimos dos Gin-Tonic de Citadelle y Q- Tonic. ¡Sorpresa! , la atenta y estilizada camarera de acento europeo no la conocía, finalmente nos decantamos por shweppes, el combinado ejecutado sin parafernalia previa ni haba tonka, al que acompañaban 3 rocas de cereales con chocolate blanco, negro, y frambuesa liofilizada, todo por el módico precio de 36.50 €.

A la caída de la tarde, nos acicalamos y vestimos para la cena que nos esperaba.

Sergi Arola Gastro
Zurbano, 31
Madrid
913 102 169
http://www.sergiarola.es/

Situado en la calle Zurbano, barrio de Chamberi, en los bajos de un edificio señero, casi frente por frente del hotel Santo Mauro. El establecimiento consta de planta principal, donde se encuentra el Gastro restaurante, la cocina grande de pase, y la mesa de culto para gourmets (8/10/12/14 personas), separada por una cristalera desde donde se ve el trabajo del equipo de cocina. La planta baja, con otra cocina más pequeña para elaboraciones previas, cámaras de mantenimiento y almacén. En el otro extremo, el Gastro Lounge, una coctelería que, dirige Diego Cabrera, y que al tratarse de un lunes se encontraba cerrada, donde existe zona de fumadores y cava de puros.

Muy amable D.Luis, el portero-aparcacoches, con quien charlamos a la llegada mientras apurábamos nuestros pitillos antes de entrar.

El diseño, línea bistrot de luxe de cálida decoración y sin hilo musical (para no descentrar al cliente), es obra del estudio de arquitectura de Luís Vidal, que reinterpreta el Art Decó, con toques de vanguardia como líneas de neones de colores sobre la barra y el uso de colores gris plata en paredes y sofás. Cómo no, un enorme cuadro en forma de sardina -el producto fetiche del cocinero- decora una de las paredes. Vidal ha logrado crear un espacio donde la personalidad de Sergi y Sara queda perfectamente reflejada. El mueble aparador escamoteado mil puertitas etc.

En los comienzos del restaurante se le criticó por muchas razones, una de ellas la de exigir americana, hemos comprobado “in situ”, que éste requisito se ha suavizado con el paso de los meses, y como ejemplo destacar que dos de las mesas contiguas a la nuestra se presentaron en camisa de manga larga, otro ciudadano con una camiseta (de marca eso sí, pero en camiseta), y en otra hizo su aparición otro ciudadano también en camisa y con sombrero tipo Indiana Jones. Conviene tener en cuenta que estamos en Junio y las noches de Madrid suelen ser bastante calurosas en ésta época del año.

Otro de los puntos calientes ha sido el tema precios. Que si es un despropósito con la crisis actual acudir a locales así, que si Sergi es un estirao, que si la cocina no está a la altura de lo que cobran, etc. Bueno, nuestra opinión, sólo de ésta visita, es que todo es falso, rotundamente falso. Hemos sido atendidos con enorme atención y delicadeza, la cocina brilla a la altura de 2 o 3 estrellas, los precios son la suma de todo (cocina+instalaciones+servicio) y, valorando el conjunto, nos ha parecido barato.

Capitanea un servicio impecable Sara Fort, que nos explicó al detalle la composición de cada plato, además de contar con un sumiller de excepción Dani Poveda, excelente profesional, amén de otras dos extraordinarias camareras en sala (hemos puesto a prueba su paciencia), que se vuelcan con el cliente y lo miman ya desde su llegada.

La carta consta de tres menús degustación: el menú "Gastro", compuesto por tres tapas, cuatro entrantes, un pescado, una carne, y tres postres; el menú "Básico", seleccionado a partir de los platos más conocidos en el menú Gastro, formado por tres tapas, una entrada, un pescado, una carne, y quesos variados ; y el menú "Para el amante del queso", con dos tapas, una crema y tres pases de quesos de los gustos suaves a los más intensos.

En nuestro caso optamos por el menú Gastro sin maridar (130 €/ C) + I.V.A.:

-Espuma de yogurt y judías con tomate seco, (para comer de abajo hacia arriba y servido en un vasín), reconfortante.

-Se acercó a la mesa Sergi y su peluco (IWC), a darnos la bienvenida con una sonrisa de oreja a oreja y nos trajo unos snaks para que cogiéramos con la mano:

- Aceitunas Kalamata (más pequeñas que las habituales).

- Chips de anís estrellado.

- Buñuelos de bacalao.

- Ñokis de queso de cabra con tomate.

- Tiras finas de zanahoria con cilantro.

Para continuar con:

- Cornete de Gazpacho y helado de tomate (verde).

En unas fuentes rectangulares se nos presentaron unas rodajas finas de pan con nueces y aceituna negra para que untásemos con sal de wasabi, sal de fresa, y un cuenco con AOVE ecológico variedad arbequina.

- Seguimos con espuma de ajoblanco, cerezas y vinagreta de espárragos blancos, (para repetir).

- Las archifamosas Patatas Bravas al estilo Arola.

- Flor de Calabacín relleno de Foie, brunoise de Verduras de Temporada al Aceite de Vainilla. Platazo, que además incorporaba una pizca de Oro (creo que de Salave - Asturias), en la emulsión de vainilla.

- Boquerones “A la espalda” con dados de Manzana y Sidra.

- Txangurro en un Dumpling con sopa de Berros y aire de Pepino.

- Viéira marinada y ahumada, con su embutido, puré de Tupinambo, sin coral pero agradable.

- Arroz de Bogavante guisado con tres arroces y un mantecado de ajos tiernos, los arroces eran: Basmati, Salvaje e integral (perfectos de punto), al bugre sólo le faltaba el palillín encima del trozo. Espléndido.

- Solomillo de ternera escabechado con pera de San Juan (más bien perita), cerezas y nísperos, que nos llegó a la mesa con un toque aromático de aceite de eucalipto. Sensacional.

Uno de los comensales hizo una pequeña variación en el menú y sustituyó el plato de arroz con bugre y el solomillo por un Mero en emulsión , y unas Mollejas de ternera asada en su jugo con hinojos y zanahoria baby risoladas, otro de los grandes platos de la noche.

De postre nos brindaron:

- Yogurt como una crema, helado de arroz, wasabi y nube de Kalamansi (cítrico asiático parecido a la lima).

- Sandía escabechada con helado de tomate y una infusión de manzanilla e hibisco.

- El soufflé de manzana asada, galleta “Oreo” y helado de chocolate “Ocumare”, de presentación y sabor sobresaliente. Un cazín de acero/cobre recién salido del horno, al que se sirve a la vista del cliente una haba de chocolate. De 10!

Para beber optamos por Champagne:

Comenzamos con Delamotte, blanc de blancs 100% Chardonnay de Mesnil, suave, fresco y delicado (72 €).
Continuamos con Un Diebolt-Vallois, “Fleur de Passion”, Brut á Cramant (no recuerdo la añada). Amplio, cítrico, con buena acidez, de textura cremosa. Todo un acierto (66 €). Tres botellas de agua Bezoya (3€ /ud), y acompañamos los postres con sendas copas de Tempranillo 100% dulce Fontana Pago El Púlpito (obsequio de la casa).

Los cafés variedad arábica (4 €/ud), petit fours (confitura de manzana verde, piedras de frutas, magdalenas de aceituna verde), y la cuenta nos esperaban en el gastro bar, del piso inferior, que aún estando cerrado, tienen la buena costumbre de abrirlo al final para aquellos que no pueden pasar sin fumar.

Nos acompañó Sonia, la simpática camarera catalana contándonos sus vivencias en Madrid y recomendándonos unos locales para terminar la noche.

Terminamos con un Sergi cercano, humilde, trabajador, nada que ver con el concepto que uno pueda tener por verlo con famosetes en TV, hablando largo y tendido (tenía curiosidad por saber quienes éramos), hasta bien entrada la madrugada, compartiendo experiencias, ajustes echos en el restaurante desde que empezó la crisis, críticos y criticones, Michelín, asesorías externas y por supuesto de Asturias.

En resumen, una cena para el recuerdo, irrepetible, tratados y mimados como si fuésemos de casa. Merece la pena engordar un poco el cerdo durante el año y acercarse hasta Madrid para conocer de primera mano éste templo gastronómico.

Vajilla: Deshoulieres. France y Christofle

Cristalería: Riedel y Christofle

Cubertería: Christofle

Mantelería: Bassols Lino

NOTA: Cada vez que un cliente se levanta de la mesa, baño, chutarse fuera en la calle, etc, el servicio (femenino o masculino), según el caso, cambia la servilleta por una nueva y le dan un besín en la frente al sentarse nuevamente.

¡Si es que hay que ir a la capital para aprender!

martes, 21 de julio de 2009

Madrid

En mi vida, y a pesar de haber vivido en varias capitales de España, reconozco que nunca he sido muy urbanita, pero la capital del reino, Madrid (http://www.munimadrid.es/), siempre me atrajo y me apasionó. No sé muy bien el motivo, pero es un lugar que me encanta y en el cual me siento muy muy a gusto. Madrid ofrece una amplia y variada oferta cultural, y como no (para mí lo más importante), una riquísima y variada oferta gastronómica.

Salimos de Asturias a las 4.30 horas de la madrugada y a las 10.30 horas (después de un par de paraditas de avituallamiento y una fotito de un radar) ya estabamos entrando en Madrid. Tráfico intenso, coches pitando, motos por un lado, bicis por el otro, taxis por aquí, autobuses por allá, en fín, UNA LOCURA !!

Llegamos por fín sanos y salvos al Hotel Eurostar Madrid Tower***** (http://www.eurostarsmadridtower.com/), situado al final del Paseo De La Castellana, en la torre B. Precioso hotel de 474 habitaciones con unas inmejorables vistas. Quería destacar el buen trato recibido en este hotel, cordial, cercano, amable, profesional, amén de las magníficas instalaciones del mismo. Seguro que volveremos.

El primer día decidimos visitar a una compañera bloguera, del blog Encinas Menú (http://encinasmenus.blogspot.com/), que regenta en Madrid el Restaurante Encinas, situado en el centro de la capital. De la visita a este local dará debida cuenta Nunkis.

Más tarde dimos un paseo a pié y nos acercamos a la estación Atocha, inaugurada en el año 1851 para la compañía ferroviaria MZA (Madrid-Zaragoza-Alicante), ya que un servidor tenía ganas de ver el precioso y original jardín tropical que han instalado en su interior. Abarca unos 4ooo m² y está poblado por más de 500 especies como plantas de todo tipo (acuaticas, carnivoras ...), peces de colores y sus ya famosos galápagos. Visita tambien a un mercado artesanal situado muy cerca de allí.

Por la noche tocaba la que sería la visita estrella (al menos para mí), por supuesto me refiero a Sergi Arola Gastro** (http://toni1969.blogspot.com/2009/07/restaurante-sergi-arola-gastro-madrid.html).
El segundo día aprovechamos para conocer Don Giovanní (http://toni1969.blogspot.com/2009/08/ristorante-pizzeria-don-giovanni-madrid.html), local de comida italiana regentado por Andrea Tumbarello, ya archiconocido en este y otros blogs. De estas dos visitas dará puntual cuenta Cavatappi.

En nuestra fugaz visita a la capital del reino, por supuesto que no faltaron la típica excursión para visita aquellos lugares emblemáticos como la ya nombrada Estación De Atocha y La Puerta De Alcalá entre otros. No podía faltar un paseo en el teleférico de Madrid (http://www.teleferico.com/), el cual recorre el Parque Del Oeste y La Rosaleda para después atravesar el río Manzanares y adentrarse en La Casa De Campo. Precioso el recorrido.

Y llegó el triste momento de comenzar el viaje de regreso. Por la experiencia vivida en el viaje de ida, rogué a mis dos acompañantes (y pilotos), por favor respeten los límites de velocidad y las distancias de seguridad (reconozco que soy algo tiquimisquis). Señores, prediqué en el desierto, con lo cual, cuando paramos a repostar, tuve que lanzar el órdago (por supuesto era un farol) de no subirme al coche de nuevo.

Después del rifirafe, empezamos a pensar donde parar a cenar. Decidimos llamar a nuestro amigo Compangu, el cual entre otras opciones, se acordó de la Bodega Parrilla El Capricho, situada en Jiménez De Jamuz (La Bañeza - León). Gracias por la idea Compangu, fué el broche perfecto ...

En esta excursión a Madrid, me acompañaron mis socios y amigos Nunkis y Cavatappi, con la mísera excusa de que un servidor corriera con todos los gastos.

Lo siento, tocó ESCOTE PERIGOTE !!

Otra vez será amigos !!

jueves, 16 de julio de 2009

Restaurante Sidrería Pipo´s (Benquerencia - Barreiros) (Lugo)

SIDRERIA PIPO´S

Playa de Lóngara

Benquerencia (Barreiros) LUGO

TLF. 982 12 45 84

Abierto sólo en temporada alta

!!!! NO ADMITEN RESERVAS !!!!

Por Cavatappi

Aunque parezca mentira, uno que es de sombra, pero siente verdadera pasión por el mar siempre le resulta difícil poder encontrar ese rinconcito, esa cala casi escondida de arena blanca finísima, sin pedruscos, limpia, semi abrigada, con sus rocas repletas de llámpares y mejilloninos y además con un chiringuito curioso, ordenado, con la carta justa para que todo rote, y donde todo funciona a la perfección, con el añadido “que encima no te roban”.

Sí, señores, no es un sueño, existe de veras, y lo tenemos aquí cerquita, cerca del límite natural entre Asturias y Galicia (15 Kms.aprox.).

Me refiero a San Cosme de Barreiros (Lugo), y más concretamente a la playa de Lóngara.

Con éste entorno idílico por montera, la sidrería Pipo´s (regentada por asturianos), se erige como la mejor casa de comidas del entorno con muchísima diferencia.

La casa de las paellas, reza una paellerona de grandes dimensiones a la entrada del local.

Sencillo, pero cuidado, donde Adrián Gayol en el comedor-barra, y Suárez en la cocina bordan todos esos platinos, facilones en apariencia, pero que exigen profesionalidad (como en todo), y les aporta un toque personal de buen gusto. No en vano a Suárez ya le viene el gusanillo cocineril desde tiempo atrás. Se dedicó a la construcción, al mundo de las flores ornamentales, vendedor puerta a puerta, profesor de karate, tiene una habilidad especial para componer figuras y escudos heráldicos de una complejidad y acabado asombroso, y además cocina, pero muy bien.


En mi reciente visita hemos podido degustar:

- Pulpo a la Gallega con Cachelos y Pimentón del Bierzo: De textura, sabor y dureza (me gusta al dente), perfectos, los cachelos buenísimos (10.50€).

- Almejas a la Marinera: buena almeja, japónica, creo, con la salsa trabada en su punto, y de ración abundante (300+- grs.) (11.50€).

- Chipirones Amariscados: Curiosa elaboración, los chipirones poco fritos y ligeramente napados por una especie de Txangurro de buey. Riquísimos (14.00€).

- Chuletitas de Cordero al ajillo: Poco hechas, jugosas y ¡CON EL AJO SIN QUEMAR!, acompañan unas patatinas fritas hechas al momento (12.50€).

- Flan Casero de Café: Presentado con un cordón de caramelo neutro. Rico (3.50€).

- Cucurucho industrial/ irrelevante (2.00€).

- Dos raciones de pan (2€), una botellina de agua pequeñina (1.00€) y una botella de Viña Pedrosa Crianza 2005 (http://www.vinapedrosa.com/), algo fresquín, que resultó soberbio (18.00€).

Total factura 75 €, pagados con gusto.

Al final del almuerzo, calzé mis escarapochas y realicé una inspección-paseo rutinario entre las rocas y las cuevas, por si aparece un fardín de éstos que se caen de las planeadoras “por casualidad”. Y a descansar en la arena con los negros nubarrones que avanzaban desde el norte ,y que mostraban un amenazante aspecto. Al final cayeron unas gotas que no consiguieron ahuyentarnos.

Lamento no haber hecho fotos de los platos esta visita, pero, en Septiembre vuelvo.

sábado, 11 de julio de 2009

Cascadas De Oneta (Oneta - Villayón)

La cascada de Oneta está situada en el pueblo del mismo nombre perteneciendo al Concejo De Villayón (http://www.occidente.com/villayon/index.htm) situado en el Parque Histórico De Navia (http://www.parquehistorico.org/). Llegar allí es bastante fácil.
En Navia tomamos la carretera AS-251 dirección Villayón. Antes de llegar a Villayón hay un cruce a mano izquierda en el cual cogeremos dirección al pueblo de Oneta (está señalizado). Una vez allí ya hay indicadores con la dirección a seguir. Situados ya en la primera cascada, La Firbia, podriamos seguir, ya que hay otras dos más.
La segunda cascada, La Ulloa, con una caída de casi 15 metros, el camino está mal debido al poco uso. Pero la tercera, La Maseirúa, ya no hay sendero y llegar a ella tela (yo nunca fuí a la tercera pero es lo que me comentaron personas que sí osaron ir). Estas últimas son conocidas como Zalanceiras y en el recorrido que nos llevará a ellas nos encontraremos con bastantes restos de antiguos molinos y otras pequeñas edificaciones.

Hay que decir tambien que la más vistosa es la primera de ellas, La Firbia, con una espectacular caída de más de 30 metros en varios escalones. Antes de abandonar esta cascada es obligada la visita del Molín De Abaxo, datado en el año 1820 y en el que se pueden observar las distribuciones originales del mismo.

Están declaradas Monumento Natural según el decreto 45/2002 siendo el espacio protegido de unas 12,51 Ha. aproximadamente.

Sitio guapetón y precioso, y que creo que merece una escapadita ...

sábado, 4 de julio de 2009

Restaurante Casa Antón (Cuerres - Ribadesella)(Asturias)

POST ACTUALIZADO FEBRERO 2013
 
Por Cavatappi

Aprovechando la mañana soleada y calurosa de un día cualquiera de éste mes pasado, nos pusimos al volante y nos acercamos hasta el concejo de Colunga (VER WEB/), a conocer el Museo Jurásico de Asturias (VER WEB). Situado en lo alto de un promontorio, en la zona conocida como Rasa De San Telmo, con unas vistas espectaculares del concejo y con Lastres como fondo.

Una vez en el interior, entre fósiles, restos varios, réplicas, pisadas y piedras de diversa índole, vídeos explicativos de la evolución de estas especies, se deja ver también la huella a lo grande del dinosaurio en las tres inmensas bóvedas de planta elíptica que hacen de techo de la instalación. Una garra enorme que da sensación de querer atraparnos dentro.

Nos gustó mucho, sin embargo, para ir con niños pequeños, es conveniente reducir la visita pues después de hora y media, se vuelven un poco impacientes y terminan por aburrirse y empiezan a pegar patadas a los guías.

Concluida la visita, pusimos rumbo a Ribadesella (VER WEB), para coger la carretera vieja que nos lleva a Llanes. Entre la bella estampa de casitas típicas asturianas, palacetes de indianos, campings y manzanos, llegamos al pueblo de Cuerres, donde tiene un pequeño, pero coqueto restaurante, Antonio Romero, llamado Casa Antón. Un vizcaíno casi asentado en Asturias, de gran trayectoria profesional, que un día decidió emprender un camino en solitario y coger en traspaso un local de solera en un pueblín de la Asturias de costa.

Una vez sentados en la preciosa terraza interior, bajo la sombra de un prunal (ciruelo), y a la vera de una fuente de piedra natural, dimos cuenta de los siguientes manjares:

- Carpaccio de Buey, presentado con unas rodajas finas de pan tostado y AOVE variedad Arbequina, láminas de queso 3 leches (cabra, oveja, vaca) de Pría y una pizca de pimienta negra (Obsequio de bienvenida). Riquísimo.

- Parrillada de verduras, queso de Cuevas de Mar y Salsa Romescu (13 €), con las verduras dispuestas en forma de torre y napadas ligeramente con la salsa, a la cual le faltaba algo de intensidad. Bien.

- Pulpo a la parrilla con tinta de calamar y cebolla confitada, (12 €) pequeños “raxos”, cortados longitudinalmente, presentados con la tinta y la cebollina confitada de complemento. Bien

- Croquetas de Jamón de Bellota (detalle de la casa), riquísimas, con el sabor intenso del jamón y la bechamel melosa.

- San Martín al horno, patatas panadera y pimientos (20 €), una pieza dispuesta en una fuente de horno (+- 1 Kg.), las patatinas y los pimientos en media juliana, ligeramente napadas por un velo de emulsión (tipo espalda). Buenísimo.

- Rabo de vaca relleno de Foie con tagliatelle (12 €), un buen trozo deshuesado y relleno del foie, cubierto por una cucharada de Salsa Española reducida casi a glass, en la que los tagliatelle no tenían cabida. Muy bueno.

Para beber escogimos un Remelluri Reserva 2003 (VER WEB) (20 €), bien de temperatura, y que no hizo falta decantar. Sensacional. Y una botella de litro de agua mineral Fuensanta (VER WEB) (1.20€).

De postre, optamos por una Tarta Tatín (5.50€), ligeramente templada con crema de vainilla Tahití. Para repetir.

Continuamos con Crujiente de Manzana, salsa de pera, y helado (casero) de higos (5.50 €), saquitos de pasta filo, rellenos de manzana asada, crema pastelera y pasas. Muy bueno.

Acompañamos los postres con 2 copitas de Moscatel de la Marina Enrique Mendoza 2002 (VER WEB) (poco frío), y que ya estaba algo “atejado”, pero se bebía (detalle de la casa).

Terminamos con 2 cafés (2 €) y un Gin Tonic Citadelle & Schweppes (4.50€). Barato ehhhhhhhhh.

Total de factura 96.60 € (IVA incluido)

Un establecimiento con encanto, dirigido por un cocinero con mayúsculas, que va a la punta del gas, para su experiencia, quizás por exigencias del mercado y la ubicación.

Una dirección muy recomendable por calidad y precio.

* Pan: Chapatas precocidas recién horneadas
* Cubertería: Pinti (Italia) (VER WEB)
* Cristalería: Schott Zwiesel (VER WEB)
* Vajilla: Santa Clara (Vigo), y Royal Porcelain (VER WEB)

Terminamos la ruta dando un paseo por el muelle de Lastres, y haciendo parada delante de la casa donde se rodó la popular serie de Antena 3, Dr. Mateo.

POST ACTUALIZADO FEBRERO 2013